Lo pensó, lo meditó y lo llevó adelante.
Cuando la certeza de la decisión se apoderó de él, como buen monarca, lo comentó y todo su reino sintió el golpe de la noticia. Fue promisorio y tenaz peón durante algunos años, ascendente y promisorio alfil después, para llegar a la cúspide, ponerse la corona y ser el rey de un territorio albirrojo al que defendió siempre con orgullo y pasión.
La noticia se sintió, pero los meses fueron pasando y aún su presencia en el tablero parecía que nada iba a cambiar. Paseó majestuoso su hidalguía por los caminos más altos de su Paraguay en diciembre, y la corona firme sobre su cabeza se negó a abandonarlo, quizás como para partir con él, quizás para tentarlo a que se quedara.
Sudamérica y el mundo conocen de las andanzas de este joven hidalgo, que supo llevarlas por los rincones del planeta durante años dejando marcas imborrables que permanecerán en las retinas y en el recuerdo de muchos.
Antes de partir, fue a tierras hermanas, y Brasil lo vio nuevamente colocarse en lo más alto, con los puntos necesarios para abrazarse a la cumbre, quizás para pararse en la cima y observar el reino que abandonaba.
Hay piezas sobre el tablero que se cambian por desarrollo, por ataque, o por ganancia de espacio y ese lugar que dejan se aprovecha de forma sutil e inteligente. Hay otras que ni bien son colocadas fuera de las 64 casillas, se las miran con nostalgia y se añora su regreso. Quizás comience una revuelta de peones, quizás partan con gallardía y bravura dejando hasta el último aliento, y cruzando el vasto territorio que deban transitar, cumplir con su objetivo, llegar al destino, y entregar su figura para hacer posible que pise de nuevo en el tablero la pieza que estaba fuera.
Muchas partidas han culminado luego de que el más pequeño soldado se transformara en otro, que la mano que lo guiaba creyera más necesario. Solo que esta vez, de llegar el infante a la meta, su pedido clamará por el regreso del rey y esa ya será otra partida.
Contanos tu vida rey, te escuchamos:
-Nací en Ciudad del Este hace 28 años, antes llamada Puerto Presidente Stroessner, que justo cambió el nombre poco antes que yo naciera cuando terminó la dictadura.
Aprendí ajedrez a los cuatro, cinco años, porque mi papá jugaba con mis hermanos, le enseñó las primeras movidas y me causó curiosidad, obviamente como todo hermano menor uno quiere hacer siempre lo que hace el hermano mayor y así fue como inicié.

En ese entonces no había mucho ajedrez acá. Ninguna especie de club ni nada pero si después hubieron dos profesores Julio Ingolotti y Luis Patriarca que (fue campeón nacional y maestro fide) y que me ayudó muchísimo también, entonces fue con ellos que empecé con los principios básicos y el principio de la teoría del ajedrez.
Ellos formaron a varios chicos, que después terminaron dejando, pero en esa época Ciudad del Este sacaba varios campeones nacionales, fue un muy buen momento a nivel infantil.

Después cuando tenía 8 o 9 años vino un profesor cubano, Luis Enrique Valdez, nos ayudó muchísimo, nos formó en base a la escuela cubana. Estuvo por acá hasta mis 11 años y luego nos dejamos de ver, hasta que mucho tiempo después,nos reencontramos cuando fui a jugar el Capablanca, yo ya siendo Gran Maestro y pude darle un abrazo y agradecerle mucho, porque él fue gran participe de lo que terminé siendo.
Esos profesores te fueron formando hasta que vos tuviste 10 años. Vos fuiste campeón paraguayo a los 14. ¿Cómo se fue formando el Axel Bachmann que terminó siendo campeón paraguayo tan jovencito?
Tanto Julio como Luis que eran los profesores paraguayos acá en Ciudad del Este, tenían un trabajo fuera del aérea de ajedrez.

Ellos hacían el esfuerzo , que era bastante grande porque trabajaban de 7 a 18 hs y y después en su tiempo libre o los fines de semana nos ayudaban a nosotros. Eramos varios chicos, y aclaro que yo no era el mejor , inclusive mis hermanos jugaban mejor que yo.
Esa fue una época muy linda, pero luego acá el ajedrez disminuyó notablemente ,casi todos terminaron dejando, fueron creciendo y bueno optaron por seguir una carrera universitaria o cambiaron de pasión y de una u otra forma dejaron .
Entre los 10 y 14 no trabaje regularmente con nadie pero me acuerdo del maestro internacional Jorge Gomez Baillo él me ayudó unos meses, mis padres hicieron un esfuerzo y recuerdo haber tenido varias sesiones con Jorge, pero nada regular, él fue el único con quien trabaje en esa época. Después en algún torneo pude trabajar con Zenón (Franco) , más allá de que nunca fue una relación así entrenador – alumno si pude aprender mucho de él en esa semana y también por todo lo que era Zenón en la época que yo comencé, era el único gran maestro
Tanto Zenón como José (Cubas) fueron siempre una especie de inspiración para los que veníamos atrás .

No puede pasar por alto lo importante que fue en mi formación el Maestro Internacional Cristóbal Valiente, una persona que sabe muchísimo de ajedrez además de ser un gran ser humano..
Fue una época muy linda que recuerdo con mucha alegría y melancolía porque fui muy feliz en esa etapa de los 8 a 15 años en la cual yo no me imaginaba el ajedrez como una actividad principal y lo terminó siendo. Y si bien justamente estoy en una transición en la que voy a cambiar, de todas formas no me imagino vivir un día sin ajedrez. Esa es mi idea quizás sin la competencia, pero siguiendo torneos, enseñando o algo relacionado.
En esa época el ajedrez por internet tuvo una participación importante en mi formación, poder jugar con gente alrededor del mundo e inclusive con titulados que en esa época en Paraguay no había muchos, me dio ese roce necesario para mejorarme. Fue muy muy importante el ajedrez en línea, para un chico especialmente acá en Ciudad del Este que no tenía mucha oportunidad de jugar con titulados o gente que jugara mejor que yo. Eso fue vital. Internet sin lugar a dudas fue muy importante para mi formación. De hecho en esa etapa era muy bueno en ajedrez rápido, consideraba que era mi fuerte más que el pensado.
Entonces Axel si yo te entiendo bien, vos llegaste a ser campeón Paraguayo por primera vez siendo un chiquilín y sin tener un entrenador personal particular en esos momentos.

Sí, en esa época no estaba trabajando con nadie y si bien el año anterior había salido segundo y vale aclarar que en ese campeonato nacional no jugaba ni Zenón ni José Cubas que eran los dos mejores pero estaban principalmente los Maestros Fide de Asunción que eran 2300 inclusive Luis Patriarca. Ellos eran los jugadores más duros.
Y me llegó en un muy buen momento porque yo arrastraba una cuestión medio sicológica que era jugar Panamericanos de mi categoría y como tenía dos mil y algo de elo, en esos torneos partía como uno de los favoritos y llevaba ya 10 Panamericanos y nunca había logrado una medalla. Entonces venía medio desanimado y no me veía como llegando o subiendo de nivel y vino ese torneo paraguayo que fue un quiebre muy importante, pude clasificar a la Olimpíada con esa edad, llegar a los 2300, obtener el título de Maestro Fide , fueron varios resultados juntos.

Ese campeonato paraguayo fue en el 2004 y al año siguiente disputé mi décimo Panamericano lo gané y al poco tiempo llegué a los 2400 y el título de IM, fue como un lapso de meses en los que parecía que los resultados que no habían llegado antes, llegaron todos juntos.
Y de hecho no jugaba mucho, porque en Paraguay no había prácticamente torneos más allá del campeonato nacional y lo único que jugaba era tanto en Argentina como en Brasil.
Todas mis normas de maestro internacional las hice en Brasil y la norma de Gran Maestro hice una en la Olimpíada que fue doble y la definitiva fue en Villa Martelli. Nunca hice una norma en Paraguay.

¿Que cambió en tu vida ese logro? ¿Los medios paraguayos se hicieron eco de que un niño de 14 años había sido campeón del país?

Te cuento que el récord de los 14 años fue quebrado hace poco por Guillermo Vázquez que es probablemente nuestro próximo gran maestro, él también estudia en la misma Universidad que fui yo, fue becado por el ajedrez y no tengo dudas que pronto llegará a Gran Maestro.
Con respecto a tu pregunta, si recibí mucha más atención si bien el ajedrez seguía siendo un deporte minoritario, recibí bastante atención de la prensa, quizás si la gente me fue asociando, el caso del chiquito que había salido campeón nacional. Y yo que soy medio introvertido, muy perfil bajo, no era algo que me agradara mucho, cosas como por ejemplo que fuera a la escuela y que me llamaran frente a todos y ese tipo de cosas, no fue algo que yo dijera «que lindo recibir tanta atención», porque no era precisamente lo que yo buscaba.
¿Cómo pudiste complementar tu carrera universitaria con la competencia?

Cuando fui a Estados Unidos lo hice con 17 años y era Maestro Internacional, tuvo que ver mucho que en esa época el entrenador era Gilberto Hernández, quien después terminó siendo un gran amigo igual que toda su familia.
Él fue quien me dio ese empujoncito para llegar finalmente a Gran Maestro, que fue en la etapa en la que estaba en la Universidad. Pero si es cierto, que después que llegué al ese título, mi nivel de ajedrez se estancó durante cuatro o cinco año, hasta bajé elo, dado que el ajedrez dejó de ser mi actividad principal, yo estaba enfocado en terminar mis estudios y entendía que el ajedrez debía esperar un momento y bueno cuando los terminé ahí si intentar mejorar porque sentía que estaba todavía lejos de mi techo.
La forma de complementarla es muy personal, depende de cada uno. La carrera universitaria es una buena opción, y más allá que sepas que te vas a dedicar al ajedrez, siempre es bueno tener un plan b, en caso que la cosa no salga como uno imagina. Si se tiene la oportunidad hay que aprovecharla. Tampoco está mal si la persona quiere dedicarse de lleno al ajedrez, algo que yo respetaría y hasta admiraría bastante, es de valientes dedicarse de lleno a una actividad así no es fácil y como todo requiere esfuerzo. Por eso creo que depende de cada uno, hay muchos factores que inciden para tomar la decisión pero aquellos que están en la duda, yo les diría que analicen y vean más allá, que traten de ver a largo plazo, que no se enfoquen solo en lo inmediato.
¿Cómo lograste esa beca?
Originalmente había dado un examen en el Consulado Brasileño, aprovechando un convenio que hay para que jóvenes de Paraguay vayan a estudiar a universidades brasileñas y cuando estaba decidido a ir allí llega un mail ofreciéndome esta beca de estudios, que incluía todo: universidad, libros, viviendo, absolutamente todo. Era seguir una carrera y a cambio jugar por la universidad, porque los Juegos Universitarios de ajedrez son bastante fuertes , hoy en día inclusive mucho más. No fue una decisión fácil de tomar, tenía 17 años, salir de mi casa, yo en esa época no hablaba muy bien el inglés, de hecho fue un año muy difícil, en el que quedé un poco perdido, porque no podía seguir muy bien las clases. El título y ser joven tuvo mucho que ver, porque es lo que ellos miran para ver lo que ofrecen. En ese entonces yo era Maestro Internacional, y cada vez exigen más, hoy en día el equipo de la universidad está compuesto todo por Grandes Maestros.
Aparte es un oportunidad muy buena, porque si hay que financiarlo es prácticamente imposible estudiar en EEUU, ya que el costo es muy elevado
¿Cambió mucho tu carrera después de llegar a Gran Maestro?
Hubo dos momentos que marcaron mi carrera. El principal es el campeonato panamericano que gané cuando tenía 15 años. Porque era el décimo intento, y ya era una barrera sicológica muy grande.
…..Aquí reproducimos el desarrollo de la última partida de ese torneo en el que Axel se consagró campeón…
No recuerdo en el ajedrez un momento más feliz que ese y el segundo sin lugar a dudas, haber llegado a Gran Maestro.
Yo hice mi última norma en julio de 2006 con 16 años y en ese momento tenía 2470. Tuvo que pasar más de un año y medio, para llegar a finales de 2007 cuando pude superar la barrera de 2500 cuando gané el Carlos Torre y ahí finalmente llegué y fue como un alivio gigante.
Esos dos momentos me marcaron mucho. Igualmente después llegar a 2600, entrar al top 100 y clasificar al mundial fueron momento muy felices, pero esos dos fueron los más marcantes.
Y el hecho de tener el título de Gran Maestro, no se si cambió demasiado más allá de la confianza y el sentimiento de superación y satisfacción, pero eso momentáneo más que nada. Siempre he entendido que tengo mucho por mejorar, inclusive hasta hoy en día y si hay algo que me caracteriza es que nunca me doy por satisfecho, siempre quiero más, nunca es suficiente, eso sentía y creo que eso es lo que me mantiene, el querer seguir mejorando, más allá que ahora voy a dejar un poco la práctica de la alta competencia.
Lo que si cambió muchísimo fue que me invitaban a muchos más torneos, más oportunidades, eso si, pero igual convengamos que para ser profesional de ajedrez y con esto me refiero a la alta competencia, porque también puedes ser profesional y vivir del ajedrez a través de la enseñanza, yo creo que para ser profesional y que te den los números por lo menos tenés que estar entre los 2600 y 2650, para que te sea rentable, y obviamente mudarte, a Europa. Podés hacer lo que hacen algunos acá, que se van de vez en cuando , o hacen un tour, como suele hacer quizás Sandro, Alan, Yago, y varios argentinos y brasileños que se van para una serie y después vuelven. No es fácil dejar tu casa y todo tu entorno, es cambiar totalmente.
Entonces para dedicarte exclusivamente, no solo el título de gran maestro, te diría que tedrías que estar cerca de los 100 del mundo, o si tenes 2500, tenes que ascender . Porque si tenes eso, más que vivir, sobrevivís.
Puedo estar equivocado pero te digo en base a mi experiencia, es muy sacrificado pero si uno le encanta y le apasiona es muy gratificante vivir haciendo algo que vos amás. Eso es impagable. Hoy en día mi situación cambió no solo por la faceta económica sino porque ya no estoy solo, ahora estoy casado y vamos a tener un hijo, así que de momento se acabaron los viajes son imposbiles de sobrellevar.
También aparecen apoyos del gobierno o de la federación, pero por lo general los ajedrecistas aparte de la competencia mezclan la enseñanza para que sea más rentable, entonces cuando uno no está compitiendo enseña, por eso digo que si te querés dedicar exclusivamente a jugar, se tiene que llegar a un nivel muy alto, y es muy exigente, es un trabajo que nunca para y requiere mucho sacrificio como en cualquier disciplina en la que quieras estar entre los mejores del mundo.
Existe apoyo desde la Federación o el estado paraguayo?
A lo largo de mi carrera fue practicamente nulo, yo no hubiera llegado de no ser por el apoyo de mi familia, gracias a Dios mis padres tenían buenos trabajos y dentro de sus posibilidades me mandaban a algunos torneos, fundamentalmente los Panamericanos que los jugué practicamente todos.
En mi caso yo recibí un apoyo particular cuando llegué a 2600, ahí me incluyeron, seleccionan uno por disciplina y les dan un sueldo la Secretaría de Deportes, después me ascendieron, también tuve algunos premios. Un año salí mejor deportista del Paraguay, otro año segundo y eso llevó a que el apoyo aumente. Eso es una beca anual. Yo ahora renuncié porque me voy a estar dedicando a otra cosa, pero tengo entendido que el apoyo ahora es mucho mayor, a los campeones nacionales se les pagan los pasajes, algo impensado años atrás.
La Federación está recibiendo más recursos y eso se traslada. A fin de año se organizó aquí el Sudamericano de chicos, algo histórico para este país, probablemente en números el torneo más grande que se hizo aquí.
Aún habiendo cosas que hay para mejorar y corregir, el ajedrez paraguayo está pasando por un muy buen momento, y eso repercute en el apoyo recibido.
Que le hace falta al ajedrez sudamericano para acercarse a las grandes potencias?
Un conjunto de factores, los recursos tienen mucho que ver, pero los torneos, la falta de oportunidades. Si uno quiere llegar a Gran Maestro es muy dificil llegar en Sudamérica. Son muy pocos los torneos que dan norma. Si contamos en el último año no deben haber llegado a 10, y jugadores que se repiten 3 o 4, son muy pocas las posibilidades que se tienen.
Entonces tenes un chico que promete muy bien, pero sino tiene esas posibilidades ese chico tarde o temprano va terminar dejando. Y eso se refleja, en mi época salían más jugadores, más GM, más IM, porque habiendo menos apoyo había más torneos.
Si sigue siendo tan necesario ir a Europa va a ser muy dificil. Tendríamos que crear una especie de circuito para que puedan desarrollarse aquí en Sudamérica
Que sensación te deja el último campeonato nacional paraguayo?
Fue muy especial, más que nada por la situación de que era uno de mis últimos torneos, y si bien 2017 había sido un buen año, antes de ese torneo yo venía de muy mala racha, después de clasificar al Mundial en el Continental y prácticamente todos los torneos que jugué perdí elo, caí de 2670 a 2620, y ganar ese torneo fue muy lindo.
Además ganar en mi país es muy especial. y de todas formas «retirarme» (aunque suena muy fuerte porque estoy seguro que en algún momento voy a volver a competir), pero si poder dejar con ese título es muy especial. Más especial que el del año pasado que había ganado luego que Neuris se lo llevara dos años seguidos de punta a punta y este parecía igual, porque esta vez, en la partida entre nosotros me tenía ganado, en una posición que de 10 partidas me gana 9 y no se que pasó exactamente pero gané sin una explicación.
Hay torneo que jugás muy bien y no conseguís el objetivo y en otros como en éste, porque así lo sentí, y si se dio.Más allá de lo que es el ajedrez, hay un montón de factores que juegan un rol muy importante.
¿Te preparas de alguna forma especial para estos torneos importantes?
Ahora el entrenamiento que hago es el trabajo con los alumnos. Antes, salvo el mundial donde si sabía con quien iba a jugar. Pero sino no, si veía que estaba fallando en un sector, o en mi repertorio trato de corregir, pero no para el torneo en si, sino para ir mejorando, es mi método de trabajo apostar al largo plazo.
¿Una partida que te haya quedado grabada?
Te digo una reciente, y es la que jugué en la última ronda del Continental con Alan (Pichot). Siempre es dificil, la primera vez que jugué con él, tenía 12 o 13 años, yo era Gran Maestro y él un chiquito y me ganó.

En esa partida tenía que ganar de negras para poder clasificar al Mundial y era la primera vez que lo lograría, y ya la noche anterior no dormí y fue muy especial ganar esa partida y estuvo muy cargada de sentimientos. Ayudó que justo Alan no jugara un buen torneo, pero eso quedará en la memoria, lo que si quedará en el recuerdo fue la sensación de esa partida. Mi esposa me había acompañado a ese torneo, porque era un torneo muy especial y de hecho, recuerdo haber terminado la partida, ir a la pieza y nos abrazamos y empezamos a llorar porque era un momento muy fuerte. Si le llegas a preguntar a mi esposa, te dirá que ese fue el peor torneo, fue muy stresante y poderlo terminar bien fue muy emotivo.
¿De todos estos años de competencia, te quedó preferencia por algún torneo en especial o por algún lugar específico?
Torneo, el más especial como jugador, es la Olimpiada, porque representas a tu país, te da ese sentimiento de orgullo y competís con los mejores del mundo. Aparte siento que a nosotros nos va muy bien, porque más allá de que somos rivales a nivel nacional, nos llevamos muy bien, y es cierto que la unión hace la fuerza, y casi siempre terminamos más arriba de lo que empezamos.
En cuanto a lugar, es raro que me sienta mal en algún lado, pero el país en el que gusta más jugar es Argentina, porque Paraguay es mi primer país pero casi no juego acá salvo el torneo nacional, y siempre jugar en tu país te genera cierta presión extra, y Argentina vendría a ser mi segundo país, mi mamá es de allá y la mitad de mi familia también. De alguna forma estoy acostumbrado, tengo cierta sangre argentina, cuando voy me reciben de la mejor manera, me siento como en casa, las costumbres con relación a Paraguay son similiares y eso repercute en tu actuación. Es raro me vaya mal en un torneo allá, de hecho mis resultado fueron buenos y sin duda tiene que ver que me siento muy a gusto.
¿La llegada de Neuris para jugar bajo bandera paraguaya,fue positiva para el país?

Más allá de representarnos ayudó muchísimo porque estuvo un buen tiempo enseñando y eso es vital.
Y aparte de ser un excelente jugador, cayó muy bien como persona en el ambiente paraguayo. Te diría que no sumó, más bien multiplicó.
Y sobre el tablero está fuera de cuestión, es muy bueno, un 2600, y como jugador de equipo es genial, tiene mucho para dar y en la próxima Olimpíada irá como primer tablero y tenerlo de primer tablero es un lujo y una garantía.
¿Que libros te parecen que son necesarios para la formación de un ajedrecista?
Varios y depende de cada uno, pero te diría que básicos y vitales para la formación son los 4 tomos de Grau y Mi Sistema de Nimzowitch.
Anuncias tu retiro de las competencias, ¿como ves el futuro de Axel Bachman?

No fue una decisión fácil, aunque la venía analizando hace un par de años. Pero yo siempre quise hacer algo más, o en la enseñanza o fuera del ajedrez. Siento que todas mis energías a lo largo de mi vida fueron centradas en el ajedrez y si bien le dediqué un cierto tiempo a la carrera universitaria, tampoco ello me demandó demasiado.
Ahora por mis obligaciones que son otras, tengo que estar más presente, no puedo hacer tantos viajes, y también demostrarme que soy capaz de aprender otras cosas y ser productivo no solo en el tablero o en la competencia sino en otras áreas de la vida, la cual es muy linda, y hay que aprender de todo un poco.
¿Y como me veo? eso es un misterio, no soy de calcular demasiado, hago lo que creo en el momento, y si bien voy a poner lo mejor de mi, ni idea cual será la situación en seis meses. Si se que que seremos tres en la familia, estamos muy felices con mi esposa, y en lo laboral se que estaré enseñando como lo he venido haciendo y en la parte académica veré como va todo, estoy poniendo mucha energía y estoy aprendiendo a diario.
Muchas gracias por tu tiempo y por la nota Axel. ¿Algo que quieras agregar?
Quiero agradecerte por esta nota, fue muy amena, y justo en este momento tan especial para mi, haber repasado mi carrera, se me vienen tantas imágenes y recuerdos de más de 20 años de carrera, y saber que desde ahora todo esto va a pasar a segundo plano me da ya un poco de melancolía, pero sabiendo que es la mejor decisión y la tomo a conciencia y sabiendo que todo irá bien a partir ahora. No te voy a decir que no voy a extrañar, pero también estoy seguro que voy a volver.
Agradecer a todos los que pudieron hacer posible que llevara adelante mi carrera, uno solo definitivamente no llega a ningún lado, especialmente a mi familia, a mi señora que me acompaña a todos lados, a los amigos del ajedrez y también los de fuera del ajedrez, a las autoridades que apoyaron en su momento.
Imágenes tomadas de abc, kaissapy, Academiadeajedrezsoldevilla,